Las personas que sufren alopecia suelen culpar a menudo del problema a padres, abuelos y demás ascendientes. Como ocurre con el mayordomo de las películas clásicas, es habitual acusar a los demás: a la genética, a la herencia, a nuestro componente hormonal, etc.
Esta actitud no va del todo desencaminada, ya que la herencia es una de las causas más importantes por las cuales aparece la alopecia. Sin embargo, no es la única y por tanto debemos ser conscientes de que existen otras circunstancias que pueden provocar o acentuar la caída del cabello.
En diversas ocasiones nos hemos encontrado ante situaciones patológicas, enfermedades, que requieren o han requerido el uso de medicamentos específicos durante periodos de tiempo prolongados. Y son estos y no las enfermedades que estamos padeciendo quienes llenan la almohada, peine y lavamanos de cabellos.
Es probable que nuestro médico no haya mencionado la pérdida del cabello como efecto secundario de algunos medicamentos, por lo que no descartemos esta posibilidad y consultémoslo con nuestro médico o farmacéutico.
Existen varios medicamentos que nos pueden provocar o acentuar una alopecia. Por ejemplo, si estamos siendo tratados por problemas de acné con derivados de la Vitamina A, o si tenemos problemas de hipertensión y nos la controlan con beta bloqueantes. Esta circunstancia también puede darse si estamos sufriendo un periodo depresivo controlado farmacológicamente, o si padecemos Enfermedad de Parkinson, gota o incluso colesterol alto, y recibimos tratamientos hormonales así como anticoagulantes.
Tampoco olvidemos los tratamientos para curar el cáncer, como son la radioterapia y la quimioterapia, que conducen a una rápida y aguda caída del cabello.
Otra circunstancia relacionada con la enfermedad son las situaciones de angustia y estrés importante que pueden producirse al padecer enfermedades crónicas o de gravedad. Esta situación podría empeorar el cuadro de caída de cabello.
Por todo ello, siempre que nuestro médico nos recete un medicamento deberíamos preguntarle si tiene efectos secundarios sobre la caída del cabello. De esta manera evitaremos angustiarnos y sabremos encontrar la solución más efectiva al problema.